Fracasos de crowdfunding – 4 ejemplos embarazosos de campañas de crowdfunding no exitosas

Fracasos de crowdfunding – ¿has oído hablar de ellos? Por razones obvias, es mucho más fácil escuchar sobre campañas exitosas de las que todos hablan, pero ¿fracasos? Según la popular plataforma de crowdfunding Kickstarter, 1 de cada 10 campañas fracasa. Gracias a las campañas de crowdfunding, muchos nuevos productos tuvieron la oportunidad de ver la luz del día. Algunos de ellos, sin el respaldo de los usuarios de Internet, nunca habrían sido creados. El problema más importante no es solo la financiación, sino el proyecto que ofrece algún valor a los usuarios potenciales.

4 ejemplos embarazosos de fracasos de crowdfunding – tabla de contenido:

1. Las principales razones de los fracasos de crowdfunding
2. Promesas incumplidas
3. Precio excesivo
4. Ideas ridículas
5. Resumen

¿Cuáles son las principales razones de los fracasos de crowdfunding?

En la historia del crowdfunding ha habido casos de campañas que salieron mal y dieron una mala reputación a esta forma de recaudación de fondos. Todos los productos de la campaña fallida están unidos por una característica: la inutilidad.

El producto, servicio o negocio tiene funciones o fundamentos mal concebidos o poco prácticos, que no son útiles para nadie, pero reciben enormes fondos.

En nuestra lista se encuentra el exprimidor Juicero Press. Es una prensa americana para exprimir envases desechables vendidos bajo una suscripción paga. El paquete contiene jugos de frutas y verduras pre-exprimidos. El dispositivo está conectado a WiFi y su función es mezclar los jugos juntos; este placer se suponía que costaría solo 400 dólares estadounidenses. Solo había un problema: los paquetes de jugos podían ser exprimidos fácilmente a mano sin necesidad de usar el costoso dispositivo.

La empresa atrajo el interés de los medios y la prensa y fue descrita como un símbolo de la negativa, absurda y defectuosa cultura de Silicon Valley, donde se recaudan enormes sumas de dinero para encontrar soluciones a problemas inexistentes. La empresa ha suspendido las ventas de los jugos y los paquetes y ha recomprado el dispositivo a sus clientes. El ejemplo muestra que los dispositivos con bajos niveles de idoneidad para el uso diario no tienen ninguna posibilidad de atraer clientes.

Engaño y fraude

El ejemplo más notorio de fraude es la impresora y escáner 3D Peachy Printer. Este dispositivo logró recaudar fondos por un total de 651,000 dólares estadounidenses (lo que es el 1302% del objetivo). El dispositivo iba a costar 100 dólares estadounidenses, y sus creadores lo anunciaron como la impresora más asequible del mundo. La campaña de crowdfunding fue apoyada por 5 mil individuos, y la idea fue recibida con entusiasmo.

¿Dónde está la controversia? ¿Cuál podría ser el problema aquí? Uno de los fundadores del proyecto se apropió de una gran suma de dinero, 320,000 dólares estadounidenses, para construir una casa. Los creadores del proyecto aún prometen lanzar la impresora al mercado. Tal comportamiento destruye la reputación de la empresa y disuade a los clientes potenciales de la compra.

Promesas incumplidas

Franko 2 es otro ejemplo de mal crowdfunding. Es un videojuego basado en el título original Franko: The Crazy Revenge de 1994. Los fundadores del proyecto recibieron más fondos de los esperados (112%). El juego iba a llegar al mercado en 2013.

¿Cuál es el problema con esta campaña? El estreno del juego se ha ido posponiendo, mientras tanto ha habido cambios en el equipo de programación. Ya han pasado más de 8 años desde la exitosa campaña de crowdfunding pero el juego aún no ha sido lanzado. Se han presentado numerosos informes policiales, pero todos sin ningún resultado significativo.

Precio excesivo

No hay una razón real para que el usuario promedio apoye ideas para proyectos que nunca podrán estar disponibles para él debido al alto precio. Este fue el caso de la campaña Bed Botoxis para un producto en la frontera de la robótica y la vida cotidiana. El Botoxis era un armario especial con dos brazos programables diseñados para hacer la cama.

El producto iba a costar 1500 dólares estadounidenses, lo que es una suma considerable para el usuario promedio de Internet. En última instancia, el proyecto nunca alcanzó la etapa de prototipado porque la recaudación fue apoyada por la espectacular cantidad cero de usuarios de Internet.

Ideas ridículas

Cada ser humano utiliza aproximadamente el 20% de su cerebro. El proyecto Luci tenía como objetivo aumentar ese número. Las bandas especiales debían monitorear las ondas cerebrales e inducir sueños conscientes. La campaña obtuvo casi un 900% de apoyo (y recaudó 363,000 dólares estadounidenses), pero la empresa tuvo que detener la recaudación bajo la presión de críticas agudas.

Hubo algunas afirmaciones de que el dispositivo no tiene posibilidades de funcionar como se diseñó. Los fundadores del proyecto no proporcionaron ningún prototipo funcional del dispositivo y la campaña fracasó. Actualmente, el proyecto ha sido asumido por un inversor privado, que desea introducir el producto en el mercado pronto. Pero, ¿cuándo?

Resumen

La atractiva oportunidad de recaudar cientos de miles de dólares animó a muchos creadores a inventar artículos que a menudo son inútiles, poco prácticos y, en general, sin valor. Tales productos no resuelven ningún problema real a pesar de que sus creadores están convencidos de su potencial y valor.

Algunas personas dicen que Internet aceptará casi todo y que todo se puede vender a través de Internet, pero como vemos, no tienen razón. La experiencia muestra que no todos los productos pueden ser aceptados por la gente. Algunos de los proyectos de crowdfunding fracasaron y terminaron con acciones legales. Hubo cargos por extorsión, procedimientos judiciales, acusaciones relacionadas con promesas incumplidas. Estos son ejemplos de fracasos de crowdfunding, donde la campaña salió mal y fue contraproducente, sin sentido y no valió la pena el esfuerzo.

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